Un nuevo proyecto impulsado por el Hospital la Inmaculada llega a los municipios de Guatapé y El Peñol para atender una problemática de salud que preocupa a la región: la drogodependencia.

Se trata del Centro de Atención Móvil para la Drogodependencia (CAMAD), un programa aprobado por el Ministerio de la Protección Social que busca brindar atención integral a personas que consumen sustancias psicoactivas, como heroína y bazuco, tanto en la población local como en la flotante que visita la zona.

Una estrategia móvil e integral

El proyecto CAMAD, con una duración de seis meses, se estructura en tres fases: alistamiento, ejecución y cierre. Durante su desarrollo, contará con dos equipos técnicos multidisciplinarios (uno en cada municipio), liderados por la psicóloga Nancy Sánchez López como coordinadora técnica.

«El programa CAMAD es un programa que tiene una duración de seis meses… está dividido en tres etapas, la etapa de alistamiento que va a durar un mes, en el alistamiento en que nos encargamos en hacer la focalización de la población, en organizar… la contratación del talento humano», explicó la psicóloga Nancy Sánchez.

La estrategia incluye dos modalidades de atención:

  1. Puntos fijos de atención: Instalación de carpas en zonas turísticas clave para atender a la población visitante.
  2. Atención mochilera: Recorridos puerta a puerta en barrios y veredas para identificar y acercarse a la población local con necesidades relacionadas al consumo problemático de sustancias.

«El punto mochilero es que nos vamos a ir puerta a puerta buscando a las familias que tengan integrantes con consumos de sustancias problemáticas», detalló Nancy Sánchez.

Cambiando la mirada: una enfermedad, no un delito

Uno de los aspectos claves que se resaltó durante la presentación del proyecto es que el consumo de sustancias psicoactivas debe entenderse como un trastorno mental, una enfermedad que requiere atención médica y no estigmatización.

«Culturalmente hablando, el oriente antioqueño… el país, no te va a reconocer a ti en una encuesta que tú consumes… Es una enfermedad», afirmó la psicóloga.

El doctor Jaime Cárdenas, gerente del Hospital Inmaculada, enfatizó la importancia de este enfoque: «hay que cambiar ese concepto… el que consume la sustancia psicoactiva no es un delincuente. Es una persona con una enfermedad mental y que debe ser atendida».

Un llamado a la comunidad

El proyecto tiene la meta de atender 400 personas en total entre ambos municipios, identificándolas e interviniéndolas. La médica Linda Castaño destacó el objetivo principal: «Garantizar que las personas que consuman sustancias psicoactivas tengan atención en salud de forma fácil y segura».

«Entonces, hacer una invitación final a todas las personas que conozcan alguien consumidor, si usted es consumidor, si en su familia hay alguna persona consumidora en su barrio, pues acercarse… acercarse y que va a contar con toda la confiabilidad del caso y con todo el respeto», indicó la doctora Castaño.

El lanzamiento oficial del proyecto se realizó el 15 de julio en el Hospital La Inmaculada. Los equipos técnicos ya están en proceso de alistamiento y próximamente iniciarán las actividades en los puntos fijos y las visitas puerta a puerta.

Por Emisora